El mediterráneo podría para el 2080 tener huracanes más intensos y duraderos, los llamados “medicanes”, incluso alcanzar la categoría 1 y 2, con vientos de 119 kilómetros por hora o más. La “buena noticia” es que según este estudio, los medicanes serán menos frecuentes. Pero los daños potenciales de estos huracanes extratropicales serían muy importantes al afectar a zonas altamente pobladas, sobretodo Grecia, Italia y cerca de la región de las Islas Baleares. Por lo general, los huracanes tienen lugar en el océano pacífico o en el atlántico, en aguas tropicales. Pero a fines de este siglo podría haber también huracanes en el mediterráneo de una cierta intensidad, de categoría 1 o incluso llegar a la categoría 2. Hasta ahora, las tormentas que han tenido lugar en el mediterráneo nunca han llegado a la categoría 1, es decir, a los 119 kilómetros por hora. Pero las tormentas recientes como el medicane Zorbas o el ciclón Numa provocaron serios daños, en el caso del ciclón Numa, que tuvo lugar en noviembre del 2017, hubo lluvias torrenciales en los Balcanes y la muerte de 21 personas en Grecia, siendo la ciudad de Atenas la más afectada. Medicane, de hurricane y de mediterráneo Les llaman “medicanes”, de la contracción del inglés hurricane y mediterráneo. Un medicane o ciclón tropical del mediterráneo es un fenómeno meteorológico extraño, que se da con escasa frecuencia en las aguas del mediterráneo. E incluso la comunidad científica no se ha puesto de acuerdo sobre si son ciclones tropicales, ciclones subtropicales o bajas polares. En todo caso, el cambio climático está convirtiendo al mediterráneo en un entorno más propicio para el desarrollo de estas poderosas tormentas. Un nuevo estudio predice medicanes más intensos y duraderos pero menos frecuentes Un nuevo estudio, publicado en Geophysical Research Letters sostiene que para fines del siglo 21, para el año 2080, habrá medicanes de gran intensidad, en categoría 1 e incluso 2, sobretodo en la época de otoño. El artículo se puede consultar aquí. La categoría 1 es cuando se alcanzan vientos de 119 kilómetros por hora y la categoría 2 de 154 kilómetros. Y si bien un medicane nunca va a alcanzar la intensidad de un huracán de las regiones tropicales, los daños potenciales sí pueden ser muy importantes al afectar a zonas altamente pobladas. Otra característica es que a diferencia de los ciclones tropicales, que por lo general tardan varios días en formarse, un medicane se puede formar en muy poco tiempo, como fue el caso del medicane Numa, que se formó el 16 de noviembre del 2017, teniendo su punto culminante el 18 de noviembre con vientos de 101 kilómetros por hora. En esta foto se puede ver cómo el medicane Numa toma la estructura típica del huracán, con un ojo al centro, pero de menor tamaño que un ciclón tropical. La “buena noticia” es que según las previsiones de este modelo, estos medicanes no serán tan frecuentes. Pero los pocos que se formen podrían serán más intensos y duraderos, provocando fuertes lluvias. Entrevistado: Juan Jesús Gonzalez Alemán, investigador del Instituto de Ciencias Ambientales de la Universidad de Castilla la Mancha, en Toledo, España y autor principal de este estudio.
El mediterráneo podría para el 2080 tener huracanes más intensos y duraderos, los llamados “medicanes”, incluso alcanzar la categoría 1 y 2, con vientos de 119 kilómetros por hora o más. La “buena noticia” es que según este estudio, los medicanes serán menos frecuentes. Pero los daños potenciales de estos huracanes extratropicales serían muy importantes al afectar a zonas altamente pobladas, sobretodo Grecia, Italia y cerca de la región de las Islas Baleares. Por lo general, los huracanes tienen lugar en el océano pacífico o en el atlántico, en aguas tropicales. Pero a fines de este siglo podría haber también huracanes en el mediterráneo de una cierta intensidad, de categoría 1 o incluso llegar a la categoría 2. Hasta ahora, las tormentas que han tenido lugar en el mediterráneo nunca han llegado a la categoría 1, es decir, a los 119 kilómetros por hora. Pero las tormentas recientes como el medicane Zorbas o el ciclón Numa provocaron serios daños, en el caso del ciclón Numa, que tuvo lugar en noviembre del 2017, hubo lluvias torrenciales en los Balcanes y la muerte de 21 personas en Grecia, siendo la ciudad de Atenas la más afectada. Medicane, de hurricane y de mediterráneo Les llaman “medicanes”, de la contracción del inglés hurricane y mediterráneo. Un medicane o ciclón tropical del mediterráneo es un fenómeno meteorológico extraño, que se da con escasa frecuencia en las aguas del mediterráneo. E incluso la comunidad científica no se ha puesto de acuerdo sobre si son ciclones tropicales, ciclones subtropicales o bajas polares. En todo caso, el cambio climático está convirtiendo al mediterráneo en un entorno más propicio para el desarrollo de estas poderosas tormentas. Un nuevo estudio predice medicanes más intensos y duraderos pero menos frecuentes Un nuevo estudio, publicado en Geophysical Research Letters sostiene que para fines del siglo 21, para el año 2080, habrá medicanes de gran intensidad, en categoría 1 e incluso 2, sobretodo en la época de otoño. El artículo se puede consultar aquí. La categoría 1 es cuando se alcanzan vientos de 119 kilómetros por hora y la categoría 2 de 154 kilómetros. Y si bien un medicane nunca va a alcanzar la intensidad de un huracán de las regiones tropicales, los daños potenciales sí pueden ser muy importantes al afectar a zonas altamente pobladas. Otra característica es que a diferencia de los ciclones tropicales, que por lo general tardan varios días en formarse, un medicane se puede formar en muy poco tiempo, como fue el caso del medicane Numa, que se formó el 16 de noviembre del 2017, teniendo su punto culminante el 18 de noviembre con vientos de 101 kilómetros por hora. En esta foto se puede ver cómo el medicane Numa toma la estructura típica del huracán, con un ojo al centro, pero de menor tamaño que un ciclón tropical. La “buena noticia” es que según las previsiones de este modelo, estos medicanes no serán tan frecuentes. Pero los pocos que se formen podrían serán más intensos y duraderos, provocando fuertes lluvias. Entrevistado: Juan Jesús Gonzalez Alemán, investigador del Instituto de Ciencias Ambientales de la Universidad de Castilla la Mancha, en Toledo, España y autor principal de este estudio.