En esta entrevista hablamos con Alejandro Calore. La historia de este videógrafo de bodas comienza hace veinte años, cuando terminó su carrera en una escuela de cine. Al acabar su formación, decidió dedicarse al vídeo social, que en su país eran los vídeos de boda. A finales de 2010, con la aparición de las réflex, Alejando cambió por completo su estilo, ya que se dio cuenta del potencial que estas tenían. Gracias a este cambio, decidió crear su propia empresa, ya que quería llevar sus vídeos de boda a ser algo más personal y poder aplicar lo aprendido durante su formación en la escuela de cine. Alejandro nos cuenta que apenas nos lleva equipo técnico, además de ir solo. Esto se debe a que no le gusta delegar en nadie, además de que le gusta tener el control de todo, y eso solo puede conseguirlo yendo solo. Tal vez, esta sea una de las principales razones por las que no se dedica a las producciones audiovisuales en la industria del cine. Reconoce que más de una vez ha tenido que decir que no a una pareja, ya que estas tenían en su cabeza una idea totalmente opuesta a la manera de trabajar de Alejandro. Bajo su punto de vista, cada cliente viene a ti por lo que ha visto, así que debe de confiar en tus elecciones a la hora de que instrumentos usar o que planos hacer. Al final de la entrevista pedimos tres consejos: El primero es la formación. Es muy importante formarse, apostar por ella y conocer el lenguaje audiovisual. El segundo consejo consiste en buscar la inspiración en el cine más que en el trabajo de otros compañeros, para así expandir tus horizontes. Por último, pero no menos importante, es crear tu estilo y marca personal, ya que es lo que te colocará en el mercado y te diferenciará de tus compañeros
En esta entrevista hablamos con Alejandro Calore. La historia de este videógrafo de bodas comienza hace veinte años, cuando terminó su carrera en una escuela de cine. Al acabar su formación, decidió dedicarse al vídeo social, que en su país eran